Proyecto análogo. Puebla, México
Hace un año aproximadamente conocí a esta pareja mexicana y a su precioso trabajo, Proyecto análogo, donde fotografía y escritura quedan entrelazadas con mucho gusto y armonía.
María Prieto y Pablo Argüelles son Proyecto análogo, vehículo transportador de su recorrido fotográfico y personal.
María Prieto es diseñadora de información visual, fotógrafa y cofundadora de Proyecto Análogo y La Máquina Roja Ediciones. Su trabajo como diseñadora editorial ha acompañado publicaciones nacionales e internacionales y su fotografía y collages han sido publicados y han acompañado textos desde 2017. Actualmente asiste al Creative Practices Program del International Center of Photography.
Por otro lado, Pablo Argüelles estudió Comunicación, es escritor y fotógrafo, combinando letras y formatos fotográficos con una profunda curiosidad por las ciudades y la luz. Desde hace diez años escribe columnas y crónicas sobre temas menores y ha sido locutor de radio y profesor de periodismo y fotografía. Cofundador de Proyecto Análogo y La Máquina Roja Ediciones, actualmente asiste al Creative Practices Program en el International Center of Photography.
En los dos casos fotografían en analógico, incluido medio y gran formato y en película instantánea, con la que María tiene un proyecto más íntimo.
Ambos practicaban la fotografía desde la infancia-adolescencia y cuando llegaron a la universidad, muy ilusionades, descubrieron que la fotografía ya no les aportaba lo que hasta entonces, dejando así de verle el sentido. Al tiempo y de manera independiente, cada une recibe por casualidad una cámara familiar coincidiendo con el inicio de su relación sentimental y es así, mediante la propia fotografía, la búsqueda de carretes o las dudas sobre reparaciones, que de una manera muy mágica comienza esta relación.
En 2017 inician el proyecto Diario fotográfico impulsado por el gran archivo de negativos y polaroids que tenían almacenados y como una manera de completar el ciclo de la fotografía, siendo el fin la publicación en soporte físico. El Diario lo lanzaron poco antes del inicio de pandemia, en 2020 y las 300 copias que repartieron de manera estratégica en poco tiempo se agotaron. Nos cuentan que fue un gran punto de inflexión, pues cobraron reconocimiento y empezaron a ser, en cierto modo, un referente para la gente local quienes sin saber qué hacer con sus cámaras viejas las cedían a la pareja para que las reaprovechasen.
Durante la pandemia publicaron de manera online su II Diario fotográfico y en 2022, el tercero, ya agotado. En estos diarios podemos encontrar escritos y fotografías producidos por ambos, aunando sus dos grandes pasiones.
En su página web también encontramos una sección llamada Vínculos donde incluyen todos los artículos en los que colaboran, como por ejemplo en la revista neoyorkina Viceversa Magazine donde también se combinan fotografía y texto. Son artículos que podemos encontrar de manera online y que recomiendo leer por su gran gusto y delicadeza al crear estas lecturas.
Algunas imágenes de su artículo “Topografía de una (sola) calle”, publicado en Viceversa Magazine.
Durante nuestra charla comentamos acerca de la importancia de hablar sobre las cosas, de reflexionar sobre ellas y compartirlas; es a este respecto donde entendemos el bonito trabajo que realizan, hablando sobre un tema y acompañándolo de fotografías o hablar desde una imagen y todo lo que acontece a su alrededor.
La última sección que podemos encontrar en su web es la denominada Bitácora, donde simultáneamente han ido escribiendo pequeños relatos de manera independiente sobre la vida, sobre fotografía y sobre sus experiencias . En un futuro se plantean que este apartado de Bitácora sea colaborativo, produciendo así un blog comunitario.
Actualmente viven en NYC gracias a una beca para estudiar en el International Center of Photography y desde Disparafilm les enviamos todo nuestro apoyo para conseguir su propósito de vivir de la fotografía de una manera libre e independiente.
Esperamos que próximamente podamos seguir disfrutando de todo lo bonito que hacen a través de Proyecto análogo, porque no sólo las imágenes son fotografía.
¡Gracias por vuestro trabajo!