¿Qué debes saber para que te quieran en tu laboratorio de confianza?

He leído, oído y debatido mucho sobre por qué volvemos a la fotografía química. Para los mayores, es un reencuentro nostálgico; para los zetas, es un descubrimiento fascinante. Lo que muchos no saben es que la fotografía química tiene varios matices distintos a la digital. En este viaje de redescubrimiento, los laboratorios enfrentamos, entre otros, dos grandes desafíos: el almacenaje de los negativos y la comunicación con el fotógrafo. Entender estos problemas es clave para mejorar la experiencia y el resultado final de nuestras fotos.

¿Por qué debes recoger tus negativos?

Recoger tus negativos no es solo un gesto simbólico; es vital. Los negativos son tu archivo original, y tenerlos significa que puedes hacer copias o digitalizarlos en el futuro. Para los laboratorios, no recogerlos crea problemas de espacio y gestión. Con el tiempo, esos negativos no reclamados deben ser destruidos, un proceso que consume tiempo y recursos, además de tener un impacto medioambiental.

Recoger tus negativos no solo te permite conservar tus fotos para siempre, sino que también ayuda a mantener la eficiencia del laboratorio y reduce los desechos. Tus padres lo hacían, y deberías hacerlo tú también. ¡No pierdas las buenas costumbres!

¿Por qué es importante que te comuniques con tu laboratorio?

La falta de comunicación sobre cómo disparaste tu carrete puede llevar a resultados desastrosos. A veces, un simple "DEV+SCAN" no es suficiente. Si has forzado el ISO, experimentado con técnicas inusuales, o si tu cámara tuvo algún problema, es fundamental que tu laboratorio lo sepa. Esto no solo mejora la calidad del revelado, sino que también previene daños a otros rollos y al equipo del laboratorio. Si no sabemos que un carrete necesita un tratamiento especial, el resultado puede ser desastroso (recuerdo una vez que un film soup no avisado salió blanco pero le dió unos preciosos e indeseados tonos exóticos a los demás rollos del tanque, y se tuvo que tirar toda la química). Piensa en ello como un paso más en tu proceso creativo que nos permite ajustar el proceso para obtener los mejores resultados y garantiza que tus fotos salgan exactamente como esperabas. ¡Tu laboratorio te lo agradecerá!

¿Por qué importa entender el trabajo en el laboratorio?

La clave es simple: recoger tus negativos y mantener una comunicación abierta y detallada con tu laboratorio son acciones pequeñas que tienen un gran impacto. El trabajo en un laboratorio fotográfico requiere precisión y atención al detalle. Al considerar estos aspectos, ayudas a que el proceso sea más fluido y a que podamos dedicar la atención necesaria para garantizar la calidad de tus fotos. Así, no solo te aseguras de obtener los mejores resultados, sino que también ayudas a mantener la eficiencia y sostenibilidad medioambiental de los laboratorios fotográficos.

Adoptar estas prácticas puede transformar tu experiencia con la fotografía química y asegurar que cada imagen capturada sea lo más fiel posible a tu visión. Si todos somos un poco más conscientes, conseguiremos hacer que la experiencia sea más gratificante para todos en la comunidad analógica.

Andrés Blat, de Classic Film Lab

Classic Film Lab es un laboratorio de ámbito nacional que apuesta por un servicio 100% online y sencillo, que permite a todos los fotógrafos tener acceso a un revelado de calidad.

https://classicfilmlab.com/
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