Ciudad: Madrid
Lugar: Espacio Mados (C/Conde de Xiquena 12, 1b )
Horario:
Martes-viernes : 11:00 - 20.00 h Sábados : 11:00–14:00
Lugar: Espacio Mados (C/Conde de Xiquena 12, 1b )
Web: Espacio Mados
IG: @espacio_mados
TLF: 91 319 89 15
email: mados@espaciomados.com
Entrada: Gratuita
La fotografía tiene sus orígenes en antiguos experimentos ópticos y químicos. Uno de sus precursores fue la cámara oscura, un dispositivo que permitía proyectar imágenes del mundo exterior sobre una superficie. No fue hasta 1826 cuando Joseph Nicéphore Niépce consiguió capturar la primera fotografía permanente, conocida como Vista desde la ventana en Le Gras, empleando un proceso llamado heliografía.
La historia de la fotografía es una crónica de innovación, creatividad y transformación cultural. Desde sus modestos comienzos hasta la actualidad se ha consolidado como una herramienta omnipresente en nuestra vida cotidiana, revolucionando la manera en que capturamos y compartimos imágenes, y transformando nuestras formas de interacción social.
Esta exposición invita a los visitantes a reflexionar sobre el papel que la fotografía ha jugado en la sociedad y a apreciar las diversas técnicas que han surgido a lo largo de su historia.
Brigit Ber utiliza multitud de técnicas para crear o reproducir imágenes, fijas o móviles. En el 2023 presentó en Espacio Mados un trabajo utilizando la técnica de cianotipia, una técnica fotográfica que data de 1842, fue inventada por Sir John Herschel. Este proceso utiliza sales de hierro para crear impresiones de un característico color azul cian.
En esta ocasión nos presenta la serie Immortelle vue que se presenta como un conjunto de fotografías tomadas en Bretaña durante el verano de 2024 con una cámara fotográfica del siglo XIX mediante el proceso de ambrotipia.
Para Laura F. Izuzquiza la fotografía es una potente herramienta de comunicación y vinculación entre seres humanos por su capacidad de atrapar las emociones. Su proyecto Ariadna es un recorrido intrincado de apoyos que ondea entre la superficie y la profundidad de la consciencia. Es una representación alegórica de una experiencia personal que entrelaza los soportes que nos sostienen —las mujeres de mi vida— y aquello que avanza en nuestro interior de forma inconsciente —experiencias como oleaje y mar profundo—. Habiendo fotografiado a múltiples Ariadnas, entre las que se encuentran su hermana y su madre, « Ariadna somos todas, yo misma incluida », afianzando este vínculo hacia una nueva realidad.
El enfoque de Juliana González se ha centra en el ámbito de la narración visual, con una profunda conexión con la fotografía, reconociendo su poder para capturar y transmitir emociones, narrativas y perspectivas únicas. Asimismo, le interesa investigar con la psicogeografía del espacio y trabajar con el cuerpo y el entorno; en sus exploraciones visuales aborda cómo el paisaje condiciona el cuerpo y cómo el cuerpo habita y transita el paisaje.
La técnica del fotograbado, está representada en esta exposición por la obra de Jesús Labandeira. Una técnica que se desarrolló en el siglo XIX y que que combina la fotografía con la impresión en relieve. En esta ocasión Jesús nos presenta uno de sus grandes proyectos, Gradiva. Imágenes, tomadas entre 2012 y 2014, que se apoyan en el blanco y negro como soporte narrativo de un lenguaje visual con referencias a lugares comunes, sueños confusos y realidades escondidas.
Espe Pons nos muestra su trabajo Flucht un ensayo fotográfico que registra los lugares que acompañaron al filósofo alemán Walter Benjamin durante sus últimos días mientras huía del fascismo. En este proyecto, Espe Pons traza la memoria de un paisaje del cual forman parte las ideas de frontera, de huida y de libertad.
Mikael Siriilä está especializado en el proceso de gelatina de plata, empleando sobreexposición, revelado de alta agudeza y luz azul pura para resaltar el grano y crear un aspecto gráfico. Utilizando elementos oscuros y espacios negativos para simplificar los sujetos y acercarse a lo abstracto. El tono cálido dorado-marfil, logrado con granos de té, hace que las imágenes sean familiares y accesibles.
El proceso que utiliza tiene una historia de 150 años y permite obtener imágenes duraderas.