Disparando joyas en analógico

Domingo 3 de abril de 2022. Eran alrededor de las 7.00 de la mañana y recuerdo que estuve a punto de quedarme atrapado entre las sábanas desperdiciando lo que después acabó siendo un día fantástico. Por suerte me pesó el hecho de que las entradas para asistir al evento ya las tenía compradas y no podía desperdiciarlas. 

Antes de empezar este artículo, os hablaré un poco sobre mí. Mi nombre es Ferran, tengo 37 años, vivo en Cànoves i Samalús, un pueblo muy pequeño provincia de Barcelona. Lo más importante que tenéis que saber sobre mí es que no soy fotógrafo, ni un fotógrafo aprendiz ni tampoco fotógrafo aficionado, simplemente os diré qué me gusta fotografiar y sobre todo disfruto fotografiando en analógico por todo el proceso y magia que me ofrece. Me gusta experimentar con distintas cámaras, formatos y carretes. No tengo ningún tipo de formación, todo lo que estoy aprendiendo es autodidacta. Leo blogs, miro vídeos, pregunto a compañeros de la comunidad pero sobre todo me arriesgo a probar para mejorar y seguir aprendiendo.

Empecé con la fotografía analógica hace 3 años aproximadamente, compré una p&s de la marca Ricoh modelo R1 pero al poco de utilizarla me di cuenta que no era suficiente, quería controlar por mí mismo la cámara, así que rescaté de mi padre una Minolta XG-2 en muy buen estado. Recuerdo que al tirar las primeras fotos con esa cámara me fascinó su sonido, su tacto, su belleza… De repente tenía una joya entre mis manos y en ese instante fue cuando entendí que esto no iba a ser algo pasajero. Después de esa cámara, compré más cámaras, al poco tiempo compré un escáner plano, más tarde aprendí a revelar blanco y negro en casa. Siempre recordaré el primer revelado, fue un Fomapan 100 disparado con una Zorki 4k que sorprendentemente salieron la mayoría de fotos bien expuestas. Por supuesto, vinieron para casa muchas mas cámaras cómo imagino os habrá pasado a muchos/as de vosotros/as.

Haciendo fotos en el Espíritu de Montjuic con un Ilford Delta 400

Como os iba comentando al principio del artículo, las sábanas finalmente me permitieron levantarme de la cama así que inicié mi rutina matutina: Ducha, desayuno, café,… El día se presentaba nublado, con previsión de posible lluvia, así que cuando abrí el cajón de la nevera donde guardo los carretes decidí coger el único Ilford Delta 400 que tenía y que guardaba desde hace tiempo esperando a una buena ocasión. ¿Su acompañante? Una Nikon FM2n. ¿Destino? El Circuit de Barcelona para asistir al Evento Espíritu de Montjuic.

No os daré la turra explicando de qué trata este evento, pero si tenéis curiosidad, os dejo por aquí el enlace oficial donde se explica todo lo que ofrece. Os recomiendo que si sois amantes de los coches clásicos tenéis que asistir y disfrutar de todo lo que ofrece el evento, es una auténtica maravilla ver la cantidad de modelos de distintas épocas que se reúnen.

Al llegar al recinto, la lluvia se intuía cada vez más amenazante, no sabía cuánto tiempo iba a tener antes de que arrancara a llover, así que me propuse aprovechar el tiempo lo mejor posible. Por suerte, llegué bastante pronto, lo que me permitió tomar la mayoría de fotos sin demasiada aglomeración de visitantes. Me pasó por la cabeza forzar el carrete, pero finalmente decidí dispararlo a su ISO nominal. Vistos los resultados, creo que tomé la mejor decisión.

No recuerdo a qué focal y velocidad disparé pero supongo que en función de la escena los valores irían entre el f8/11 y la velocidad entre 250/500. Utilicé para todas las fotos un objetivo Nikkor 50mm f1.8 (Pancake).

 Al acceder al recinto me encontré por sorpresa con una exposición espectacular de vehículos históricos de la marca Seat. Por supuesto, aproveché para tomar una serie de fotos.

Seguí caminando por el recinto observando las distintas exposiciones que había montado la organización del evento. Era una constante detenerme y mirar por el visor del objetivo esas joyas de 4 ruedas, brillantes, deslumbrantes, esperando a ser fotografiados…

Sin darme cuenta, el número de fotos iba subiendo rápidamente así que me detuve un momento a tomar mi segundo café del día en un pequeño stand que montaron encima de la zona de paddocks. Guardo un recuerdo muy agradable tomando ese café, ya que una persona reconoció la cámara que llevaba, la observó detenidamente, luego me miró a mí y me sonrío señalando la cámara asintiendo con la cabeza y con el gesto de ok con la mano. Le respondí con la misma sonrisa y gesto de complicidad. 

La mañana avanzaba y la lluvia por momentos se asomaba aunque de forma chispeante. Seguí caminando asombrado por los coches, el ambiente, la música, los espectáculos, los concursos, las carreras, mercadillos,… Llegué a una zona en la que se concentraba una enorme cantidad de coches llegados de todos los puntos de España y de varios países de europeos, me perdí entre tantas joyas reunidas disparando fotos hasta el último frame. Mi objetivo estaba cumplido así que empecé a regresar de camino a mi coche. Justo cuando me disponía a dar los últimos pasos para abandonar el recinto, empezó a llover de forma más agresiva, tuve mucha suerte. Sólo quedaba volver a casa para revelar la película, escanear los negativos y observar los resultados.

Orgulloso de los resultados 

La realidad es que tardé un tiempo en revelar la película. ¿El motivo? Pues tenía que aligerar la acumulación de carretes pendientes por revelar y escanear antes de empezar con este último. Fue a finales de julio cuando lo revelé y no puedo estar más satisfecho de los resultados. El proceso fue con Rodinal 1:50 agitando durante 20 min. a 20º, el primer minuto agitación constante y posteriormente 10 segundos cada minuto. Paro, fijador, baño de agua y humectante. Percha de ropa colgada en las guías de la ducha, pinzas de ropa para colgar la tira de negativos y esperar a que se seque.

 Cuando acabé el primer escaneado, me sentí tan orgulloso del resultado que aunque ya habían pasado unas cuantas semanas del evento, por un momento sentí que volvía a estar allí. Alguien me advirtió que el proceso de Rodinal con Ilford Delta podía darme como resultado negativos con mucho grano. Imagino que me lo comentó a modo consejo para sacar el mejor partido del negativo. Agradezco su consejo pero como comentaba al principio del artículo, los resultados son el proceso y la magia que me ofrece la fotografía analógica.

Os dejo unas cuantas fotos más para que observéis los resultados.

Desde aquí quiero agradecer a todo el equipo de Disparafilm el tiempo y dedicación que invierten en este proyecto, sois geniales.

 

Pd: ¿Alguien se apunta al evento de abril de 2023?

Ferran Gimeno

No soy fotógrafo pero me apasiona hacer fotos.

https://www.instagram.com/allinfilmformat/
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